Seguridad vial
Las “turbo rotondas” y su repercusión en la Seguridad Vial
Hay que tener en cuenta que las “turbo roton-
das” no están diseñadas para ser cruzadas por los
peatones. Este nuevo planteamiento de glorieta ubica
los pasos para peatones fuera del anillo y, en función
de la calzada, un poco distanciados, con el objeto
de favorecer la visibilidad y seguridad de los peato-
nes, al tener los vehículos reducida su velocidad de
paso debido al propio diseño de la “turbo rotonda”.
En las “turbo rotondas” existentes se ha obser-
vado que los peatones incumplen en muchas
ocasiones las normas, no respetando los lugares de
paso destinados para ellos, pasando a través de la
“turbo rotonda”. Por lo tanto, al igual que sucede con
los conductores, ya que deben habituarse a su uso y
a sus particularidades (entre otras sus carriles son más
estrechos) es necesario modificar este comportamiento
mediante campañas informativas sobre el uso correcto
de este nuevo diseño de glorieta.
Circular por estas rotondas no es difícil, aunque
es diferente a lo que estamos acostumbrados, tal vez
por su diseño novedoso o por el segundo carril que
aparece de repente en mitad de la rotonda.
Tipos de “turbo rotondas”
Dentro de las “turbo rotondas” se puede distin-
guir entre aquellas que están señalizadas y aquellas
que no lo están. Las “turbo rotondas” sin señalizar
tienen más capacidad que una glorieta de un único
carril, pero no tienen tanta capacidad como una “turbo
rotonda” señalizada.
Las “turbo rotondas” sin señalizar suelen tener
2-3 carriles por cada ramal de entrada, mientras que
las que están señalizadas tienen entre 4-6 carriles por
cada ramal de entrada (pero el ramal de salida nunca
tiene más de dos carriles).
“Turbo rotondas” sin señalizar
Las “turbo rotondas” sin señalizar se utilizan
cuando una glorieta de un único carril no proporciona
la capacidad necesaria para la intersección. Se
puede observar en este tipo de “turbo rotondas” que
el carril de entrada se divide en múltiples carriles de
giro cuando se acerca a la rotonda. Utilizan 2-3 carri-
les de entrada en cada ramal y 1 ó 2 carriles de salida.
Al acercarse a la rotonda los conductores deben
elegir el carril adecuado para entrar. Como en este
tipo de rotondas no hay semáforos, los conductores
deben ceder el paso a los vehículos que ya están en
la rotonda.
Una vez dentro de la “turbo rotonda” los conduc-
tores no cambian de carril porque los mismos se
encuentran separados por divisores. Esto evita que los
vehículos invadan el carril adyacente y mantiene a
los conductores en el carril adecuado hacia su destino.
Los vehículos que circulan por el carril derecho se
ven obligados a salir, mientras que el siguiente carril
interior ofrece a los conductores la opción de salir o
continuar circulando por la rotonda.
Los fotogramas de la parte inferior de la página,
indican como sale un vehículo de una “turbo
rotonda” sin señalizar. Se observa cómo el vehículo
no tiene que cruzar ningún carril, previniendo de este
modo posibles colisiones fronto-laterales.
“Turbo rotondas” señalizadas
Este tipo de “turbo rotondas” tiene la capacidad
de circulación de vehículos más elevada que cualquier
glorieta. Este nuevo diseño de glorietas puede conec-
tar varias calzadas de elevado volumen de tráfico.
Al acercarse a este tipo de “turbo rotondas”, la
señalización guía al conductor por su carril apropiado.
Las señales que indican qué carril coger son claras y
los conductores tienen bastante tiempo para leer la
señal y elegir el carril por el que van a circular.
Una vez dentro de la “turbo rotonda” los vehícu-
los permanecen en sus respectivos carriles hasta que
salen de la glorieta. Los vehículos que tienen que ir
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Nº 59 - Enero / Marzo 2014
Circulación en una “turbo rotonda” en la que se
pretende girar a la derecha (verde) o girar a la izquierda
(rojo).