Revista CZ - page 21

Nº 59 - Enero / Marzo 2014
Pero del mismo modo que una imprimación
puede reaccionar con el disolvente de limpieza
durante la fase de preparación del recambio para su
pintado final, también puede reaccionar con la pintura
aplicada, y en este caso el desagravio es mayor, puesto
que habremos perdido un precioso tiempo de prepa-
ración (limpieza, enmascarado, montaje, pintura, ...).
La incompatibilidad entre la imprimación y la pintura
de acabado se manifiesta por la aparición de poros,
arrugas, y una excesiva piel de naranja, y la solución
de este inconveniente es muy laboriosa.
Una vez pintado el recambio y montado en el
vehículo, es cuando verdaderamente comienza el
calvario para un sistema de pintura. La adherencia
que se haya procurado entre el substrato (plástico) y
la pintura (acabado final) es decisiva en la durabili-
dad del sistema. En el caso de los paragolpes, la
tendencia actual en la fabricación de los mismos se
ha consolidado en el empleo casi exclusivo de polipro-
pileno, por cuestiones económicas y ecológicas. Sin
embargo, el polipropileno es uno de los plásticos que
peores características presenta para el pintado (y
también para el pegado por su reducida tensión super-
ficial crítica) y ello exige un proceso de activación
de la superficie que garantice la adherencia poste-
rior. Esta labor debe hacerse inmediatamente antes
de aplicar la imprimación, para evitar que con el
tiempo la superficie pierda las propiedades adquiri-
das y el sistema de pintado resulte fallido.
1...,11,12,13,14,15,16,17,18,19,20 22,23,24,25,26,27,28,29,30,31,...76
Powered by FlippingBook